Esta semana se hablará en
muchos artículos sobre la trayectoria de Steve Jobs y seguramente todos y cada
uno de ellos será digno de leer acerca de este gran personaje que influyó de
gran manera en nuestra vida actual. De igual forma, quiero aprovechar este
espacio para él, porque lo merece, porque creo que somos millones sus fans y
porque nos ha dado miles de ejemplos de cómo generar una marca exitosa.
Hablando del branding de
esta persona y de su relación con Apple es, y será un punto de discusión muy
interesante, para todos los que estamos en esta profesión.
La discusión comienza cuando
nos preguntamos si estuvo bien la forma en cómo se relacionó la marca Steve
Jobs, con Apple. Cuando hablamos de Apple, hablamos de Jobs y viceversa, esto
para la marca Apple, con la pérdida de este gran innovador, va a costarle mucho
dinero y una curva que tenderá a ir en caída en los primeros meses, debido a
que la personalidad de la marca está directamente relacionada con él. La
percepción que tenemos es que, si no está el innovador Jobs, Apple no nos
ofrecerá esos productos que nos sorprenden cada año o semestre. Esto no sucede
con Coca-Cola, WalMart, IBM, incluso Microsoft ha separado de cierta forma a
Bill Gates con la marca.
Hoy Apple tiene un gran reto
para mantenerse como los líderes, y dependerá tanto del talento innovador que
tengan dentro de la empresa para seguir desarrollando productos que nos
cautiven, marquen tendencias y nuevas categorías y con la misma importancia, de
un “spoke person” tan poderoso como lo fue Steve Jobs y sobre todo que haga “rapport”
con la marca.
Los caminos para recuperar
ese “Top Of Heart” pueden ser varios. Cambiando su estrategia de comunicación
WOM (Word of mouth) a una campaña masiva de comunicación, o aprovechando el
cariño que tenemos por Jobs para comunicar a través de su imagen, las nuevas
innovaciones y productos que tiene la empresa para el mercado, no lo sé, será
mucha la información y especulaciones que se generen alrededor de este gran
branding que nos ha dado siempre Apple.
Tenemos que tener cuidado
porque esto le puede pasar a cualquiera. Cuando bajamos esta relación a una
PYME o las empresas familiares, tienen el mismo efecto, la gente va a una
tienda de conveniencia por la forma en cómo lo atiende “Don José” y hacen una
conexión directa entre la tienda y su dueño, lo que a mediano plazo provoca una
relación poco saludable debido a que la marca esclaviza a la persona y depende
de ella para mantenerse en el nivel que está.
Como conclusión, es
sumamente importante definir desde un principio, los límites que tendrán tu
marca personal, con la de tu empresa, de tal forma que uno pueda vivir sin
necesidad de absorber la identidad de la otra. Nuevamente ratificamos que la
venta, no es la razón o fin de la marca o de una empresa, sino la consecuencia
de una estrategia branding bien definido.
Fuente: informabtl.com
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