Vampiritos entrega licores y
botanas a domicilio. Nació en 2004 y actualmente tienen 20 sucursales.
A los mexicanos nos gusta la
fiesta, y es común que durante la celebración se salga en búsqueda de bebidas y
botanas a la tienda de conveniencia más cercana. Sara Sacal vio en este hecho
una oportunidad de negocio. Más aún cuando su trabajo anterior estaba
relacionado con la venta y promoción de alcohol.
“Entendía perfectamente los
hábitos del consumidor, conocía el mercado y sus necesidades nocturnas.
Entonces se me ocurrió la idea de crear un negocio donde el bar fuera a
domicilio, donde con una llamada se pueda pedir productos como cerveza,
licores, cigarros, farmacia básica, hielos, y botanas hasta las puertas de
cualquier hogar en menos de 30 minutos”, dijo Sacal.
Fue en 2004 cuando Sara
arrancó. En sus primeros meses de operación, ella misma tomaba los pedidos
mientras que su esposo, quien funge como su socio, hacía las entregas. Hoy, con
20 sucursales distribuidas en la Ciudad de México y Pachuca, ya cuenta con un
call center que se encarga de levantar el pedido. El horario de atención abarca
de jueves a sábado de 7 de la noche a 4 de la mañana. En algunas ocasiones
también funciona en días festivos.
“Nuestro lema es ‘No salgas,
llegamos de volada’. Atendemos alrededor de 160 pedidos por noche. Si el
servicio no llega en 30 minutos, todos los productos que no sean bebidas alcohólicas
son gratis, esa es nuestra propuesta y nos ha funcionado muy bien”, aseguró.
Lograron replicarse
La primera unidad la
abrieron en 2005 y abarcaba la zona de Bosque de las Lomas. Tres
años después, abrieron la segunda cerca de la Condesa.
“Nos dimos cuenta de que
queríamos crecer y que el costo para ello era alto y sobre todo que teníamos
que contar con una infraestructura importante para estar al pendiente del
negocio, por
ello decidimos franquiciar”, indicó.
La ventaja de este esquema
de negocio es que se puede operar desde casa, debido a que única- mente se
requiere una bodega de 30 metros cuadrados para almacenar el stock de
productos. En su práctica, Vampiritos busca un régimen de responsabilidad
social al no vender nunca alcohol a menores y a gente alcoholizada. De hecho,
ofrece un servicio con descuento de taxis durante toda la madrugada.
“También le damos trabajo a
gente discapacitada o mamás solteras contestando los teléfonos. Esta oferta se
amplía a gente que le gusta trabajar de noche o quiera un segundo empleo”,
abundó.
Actualmente, Sara Sacal y
sus Vampiritos, tienen planes de expandirse a otras partes de la república y
del mundo.
“Nosotros seguiremos apostándole
a replicarnos y con ello crear nuevos empleos”, concluyó.
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